“Cada uno de nosotros debe tener muy claro quién es, qué quiere, qué le gusta y para qué es bueno. Así, cada cual puede escoger bien su mejor campo de acción. Una vez decidido, hay que concentrar todos los esfuerzos, focalizar, en aquellas actividades en las que uno tenga mayores fortalezas. Lo demás hay que olvidarlo o delegarlo…”
Axioma de Sócrates
La pasión por trabajar en lo que a uno le gusta, es un factor determinante de la automotivación. Genera placer y el tiempo pasa con suavidad. En estas condiciones, simplemente, a lo difícil se le llama oportunidad.
Muchos filósofos han afirmado: ¿Sabía usted que cuando puede decir “Me gusta mi trabajo” reduce el riesgo de enfermedad cardiaca? Un estudio llevado a cabo por varias universidades, en tres continentes diferentes, sobre las causas de la enfermedad cardiaca, coincidieron en la misma formulación de preguntas, a sus pacientes: ¿Es feliz? ¿Ama su trabajo?
Los resultados, de dicho estudio, indicaron que aquellas personas que respondieron afirmativamente, tenían mayor probabilidad de no enfermarse del corazón. Así lo demostró, cuarenta años después, las causas de muerte, de los involucrados en el estudio.
Las conclusiones son evidentes. Cuando usted dedica todas sus energías, todo su esfuerzo, toda su atención y entusiasmo, a lo que lo llena de pasión, a lo que le gusta y prefiere, su sintonía con la vida es tan positiva, que la llena de salud cada día.
Cuando usted hace lo que le gusta, la vida se comporta diferente con usted.
Su salud se rejuvenece, en el letargo del tiempo. Es la mejor manera de evitar cualquier cirugía.
Haciendo lo que le llena, genera más momentos de endorfinas, que adrenalina. Es tanto así, que existen dos tipos de estrés, el negativo, llamado “Distres”; y el positivo, o placentero, llamado “Eutres”.
En el Distres, la ansiedad, la duda, la pesadez, la inconformidad, la decepción, la preocupación indeseable, inunda el día a día. Se libera cortisol, más de lo normal; se mantiene el cuerpo más acelerado que de costumbre. Las palpitaciones, comienzan a aparecer en la cotidianidad, y los días se hacen más indeseables.
Algunas de las siguientes escenas, comienzan a formar parte de la vida: Fatiga física o mental; enganches emocionales con uno mismo, y con los que nos rodean; dolencias físicas con tendencia a lo crónico; pesadez con el transcurrir de las horas; hipertensión arterial; cambios de humor incontrolables; explosiones emocionales, con frecuencia.
En el Eutres, las ganas y el deseo, por lograr, alcanzar o superar, inunda el cerebro de endorfina. Nos prepara para afrontar cualquier situación, con mayor deseo, donde la decepción, no es opción. Cada amanecer, es la mejor excusa para comenzar o continuar con la faena.
Cuando usted desea algo, su mente está tan centrado en ello, que disminuye los efectos colaterales, mientras no alcanza lo deseable.
Al desear, genera placer, y el placer disipa y alivia el dolor. Cuando tiene foco en su vida, éste concentra su accionar, haciendo que lo que perturbe se diluya en la búsqueda de alternativas.
Cuando el deseo también lo acompaña la acción, de tanto invertir tiempo positivo en ello, se fortalece su organismo y su capacidad emocional, para tolerar cualquier revés, o insistir en seguir, las veces que sean necesarias, para alcanzar lo deseable.
Cuando usted hace lo que le gusta, lo problemas son simplemente dificultades temporales.
William Shakespeare dijo una vez: “El destino baraja las cartas, pero somos nosotros los que jugamos la partida”. Al concentrar sus esfuerzos y deseos, en una meta clara, o en objetivos puntuales, se prepara inconscientemente para soportar cualquier vicisitud y tomar mejores decisiones. Su afán de alcanzar lo deseable, le ayuda en encontrar los mejores caminos y con ello, la ruta de la realización.
El victimismo disminuye a su mínima expresión, convirtiéndose uno en su propio héroe, donde el orgullo en el hacer, transforma la rutina en aventura.
Cuando lo que deseas te llena, el vaso siempre tiene más agua de lo normal, las ganas están en condición normal y las quejas desaparecen del horizonte.
En este momento, ¿Estás haciendo lo que te gusta?
Juan Carlos Caramés Paz
Experto en Creatividad, Autor, Conferencista, Asesor y Consultor.
Con más de 20 años al servicio de más de 800 empresas y 1.500.000 seres humanos formados. Más de 50.000 horas de facilitación. Más de 3.500 conferencias dictadas en: Venezuela, Panamá, Guatemala, Costa Rica, Estados Unidos, Colombia, México, Argentina, Perú, Dubai.